Marianella Ghiggeri es una joven y exitosa emprendedora. Comenzó su carrera a una edad en que muchas chicas se interesan sólo por la ropa de moda, quizá por eso, conocerla nos resultó sumamentes interesante.
¿Qué descubrimos? Que tiene condiciones naturales para el liderazgo, dotes empresariales y, lo más importante, ideales sociales y preocupaciones sobre la educación.
MdE: ¿Cómo llegaste a interesarte a los 15 a interesarse por el tema de los negocios?
MG: Junior Achievement Argentina se presentó en mi colegio (Río de la Plata) en 1996 para desarrollar el programa «Economía Personal» y, desde ese momento, comencé a interesarme cada vez más en todo lo relacionado con la economía y los negocios.
MdE: ¿El resto de tus compañeros también se interesó? ¿El interés que despertó la propuesta fue semejante entre varones y mujeres?
MG: El Colegio Río de la Plata no se hizo mixto sino hasta después de mi graduación. Recibimos los cursos de Junior Achievement un grupo de 30 mujeres que cursábamos todos los días juntas.
Creo que no es correcto generalizar y, tal vez, sea imposible generar interés por los negocios en 30 chicas del mismo modo. Además estos programas no fueron diseñados exclusivamente para generar el interés por los negocios, sino para darle a los jóvenes las herramientas necesarias para proponerse y cumplir metas realistas a corto y largo plazo entre otras habilidades.
Muchas de las alumnas de mi colegio, y seguramente de todos los otros que implementaron este programa, han tenido la posibilidad descubrir sus aptitudes personales y así tomar mejores decisiones con respecto a sus vidas.
MdE: Terminaste el colegio y seguiste formándote en seminarios en USA, según entiendo. ¿Estas estudiando, o pensás hacerlo, en la facultad? ¿Cómo sigue tu formación profesional?
MG: Luego de finalizar mis estudios secundarios comencé a estudiar Economía en la Universidad de Buenos Aires.
Actualmente estoy cursando el 2° año de la carrera y en mis proyectos figura estudiar en el exterior una vez recibida la licenciatura.
De hecho estoy viendo la posibilidad de estudiar en Washington DC o en New York a partir del próximo año, de esta forma estaría terminando la carrera de grado en USA, pero añoraría un título de grado de mi país.
MdE: ¿Cómo te relacionas con Junior Achievement una vez que terminaste el colegio?
MG: Fui convocada por el Dr. Eduardo Marty (Director General de JA) y la Lic. Contanza Oxenford (Directora de los Programas de Escuela Media de JA, junto a Marianella en la foto) para formar parte de un nuevo proyecto: Educación para el Futuro, una fundación que tiene la licencia de los programas de NFTE.
MdE: Me gustaría que nos cuentes sobre el proyecto, fundamentalmente en qué consiste y cuáles son sus objetivos.
MG: La Fundación Educación para el Futuro (que posee la licencia para desarrollar los programas de NFTE en Argentina) sabe que la educación involucra al hombre en su totalidad y de ese modo es el mecanismo a través del cual se inculcan y transmiten los valores de libertad, justicia, y prosperidad. Actualmente estoy a cargo de la coordinación de las actividades de esta fundación en Argentina.
El capital humano, constituido por las calificaciones y habilidades de cada individuo es mucho más difícil y costoso de reconvertir. La educación es una forma de inversión en capital humano, sin duda la más importante. Por ello invertir en educación es tener visión. Una buena formación es una herramienta importante que podemos ofrecer hoy a los chicos para que luchen por un futuro mejor.
El proyecto de la Fundación Educación para el Futuro se basa en el programa llamado «Espíritu Empresarial«. En concreto, enseña a jóvenes de muy bajos ingresos las bases para comenzar una pequeña empresa.
Los estudiantes de 16 a 22 años reciben el programa «Espíritu Empresarial» por medio del cual aprenden las bases para desarrollar un negocio y al mismo tiempo comprenden la importancia de trabajar en equipo, desarrollar el pensamiento crítico de todo buen emprendedor, planear y luego actuar, tomar decisiones en el momento justo, y organizarse.
Tratamos de realizar un cambio necesario en la mentalidad de los jóvenes de escasos recursos de nuestro país ya que, lograr que los chicos puedan acceder a las reglas del libre mercado provocará el cambio de la sociedad misma. Se trata de un programa innovador, con características únicas que ha sido desarrollado en Estados Unidos con muchísimo éxito y ha generado una repercusión increíble en las escuelas y los chicos.
MdE: ¿Cómo ves el futuro para los jóvenes emprendedores en Argentina?
MG: Creo que los argentinos pertenecemos a una sociedad prejuiciosa y perseguimos principios erróneos. Existe una escala de valores muy confusa y el límite entre los que se «supone» que está bien o mal es difuso. Oportunismo, demagogia y egoísmo son moneda corriente en nuestro país.
Sin embargo se han desarrollado muchísimos mecanismos y proyectos como los de la Fundación Educación para el Futuro y Junior Achievement que son necesarios para que la mentalidad de estos chicos cambie y puedan ver así la proyección de sus vidas en forma más optimista. Estos jóvenes se encuentran desesperanzados y con la autoestima muy baja. Sin embargo, una vez estimulados, son capaces de crear e innovar de manera increíble.
Muchos jóvenes emprendedores argentinos ya han triunfado en el mundo con sus negocios, y creo que esto es sólo el comienzo. Un emprendedor es un líder que lucha por alcanzar sus objetivos y es altamente probable que tenga que sufrir muchísimas frustraciones a lo largo del mismo. Gracias a estas frustraciones el emprendedor APRENDE.
Por ello, quien alcanza sus metas no es sólo un emprendedor sino que también logra la satisfacción personal de saber que es capaz. Un emprendedor no es sólo aquella persona que comienza su propio negocio, encontramos emprendedores en todos los ámbitos de nuestra vida, basta con mirar alrededor nuestro para encontrar uno.
MdE: En una temática más personal nos gustaría saber cómo influyó, o no, tu familia en tu vida profesional y cómo es la relación con tu grupo de pares.
MG: Afortunadamente siempre tuve (y tengo) el apoyo de mi familia. Ellos siempre me incentivaron a alcanzar mis metas. Creo que lo que más me ayudó es la confianza que me tienen. Cuando a los 15 años viajé por primera vez a USA para participar en un seminario organizado por Junior Achievement no me pusieron trabas y viajé sin ningún problema.
Estoy segura que muchos padres de mis amigas hubiesen prohibido que sus hijas viajen solas a los 15 años a un país que desconocían. Conociéndome como me conocen, y sabiendo que manejaba el idioma, me ayudaron a realizar los trámites para salir del país por ser menor de edad. Sin embargo estuvieron preocupados en todo momento y me demostraron todo su apoyo en cada decisión que tomé y tomo actualmente.
Allá por sus 17 años, (han pasado sólo dos), Marianella presidió la compañía del grupo del cole. Se llamó «No Limits, JA«. Creo que fue un buen nombre y que, en alguna medida, reflejó muy bien los objetivos, que seguramente eran de todas las participantes en aquel momento, y que hoy se reflejan en esta joven de 19 años.