“Me parece que las mujeres tienen que elegir – o dejan de lado a la gran red, o comienzan a transformar la red por sí mismas, antes de que se deforme más” (Reformulando Internet por la justicia mundial, Agenda n 32, 1997, Agenda Editorial Collective).
Las redes de mujeres no son novedad. Las redes sociales y políticas, formales e informales, de las mujeres han existido durante siglos. La razón principal para la existencia de estas redes ha sido, por lo general, para compartir información. ABANTU para el Desarrollo hace notar que esta es casi siempre una de las pocas herramientas a las cuales pueden acceder sin costo las mujeres que han sido marginadas por los procesos y la decisiones que conforman su vida.
Las redes no operan aisladas Se ven afectadas por cuestiones externas que son muchas veces muy duras para las mujeres en Africa. Las mujeres africanas no conforman un grupo homogéneo y sus redes son diversas y complejas. Se ven desafiadas por diferencias como raza, clase, ubicación geográfica, acceso a los recursos esenciales como educación, tierra, agua potable, atención de la salud y sistemas de crédito. La comunicación electrónica y el acceso a las nuevas tecnologías de la comunicación y la información (NTIC) no son una excepción. Se ven influídas directamente por la realidad social.
El trabajo en redes electrónicas tiene el potencial de facilitar vínculos entre organizaciones, estructuras y proyectos. Las barreras nacionales y geográficas pueden superarse. La Internet desafía la tensión entre lo local y lo global y pone información a disposición que sería inalcanzable de otro modo. Las redes de mujeres están utilizando el potencial de Internet para desafiar la injusticia de género.
Cómo las mujeres utilizan la comunicación electrónica
Las organizaciones de mujeres utilizan Internet de variadas formas. Estas incluyen la comunicación propiamente dicha, la búsqueda de información, el apoyo mutuo, el cabildeo y la defensa de los derechos de las mujeres y las campañas de solidaridad en favor de un acceso mejor de las mujeres a las NTIC. Las aplicaciones prácticas incluyen la distribución de imágenes alternativas, balanceadas e equitativas de la mujer; el intercambio de opiniones, experiencias e informaciones con otras activistas, promoviendo petitorios a nivel local, regional y mundial; la promoción del trabajo organizacional; el acceso y la diseminación de información actualizada alrededor del mundo.
La velocidad y la inmediatez de la comunicación electrónica la convierte en una herramienta efectiva para ser utilizada por las activistas ante situaciones que exigen atención inmediata. La Internet tiene un alcance amplio y cruza los límites nacionales y geográficos y, en particular, es efectivo su uso cuando se necesitan respuestas urgentes.
Algunos ejemplos de cómo las mujeres usan Internet son:
- Para compartir información, solidaridad y apoyo
- Para cabildeo y defensa de los derechos de las mujeres
- Para investigación
- Para desarrollo y diseminación de información
- Trabajo en red a nivel mundial: cruzando fronteras con un tema en común (Por ejemplo, el proceso de Beijing)
Pero no es suficiente cantarle loas a la tecnología. Las mujeres también están trabajando para lograr mecanismos que apoyen y desarrollen el uso que ellas hacen de esta tecnología.
Algunos de estos mecanismos son:
- Educación y capacitación
- Intervención en las políticas que rigen las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación.
- La creación de contenido local y nativo
- La capacitación de las niñas para que accedan a las nuevas tecnologías
- El desarrollo participativo: construyendo juntas los sitios web
- La democratización del acceso a la información: usando « viejas » y « nuevas » tecnologías.
Debido a la naturaleza cambiante de las NTIC, no podemos quedarnos tranquilas y asumir que hemos alcanzado el punto en que podemos comprenderlas y utilizarlas adecuadamente. Las redes y la web, por su naturaleza, resultan muy cambiantes.
Las mujeres en África están utilizando la implementación de las NTIC para desafiar las realidades de la pobreza, la violencia sexual, la inequidad política, entre otros, a nivel local y construir un movimiento de mujeres en África con buenos vínculos a nivel mundial.
La globalización está en el corazón de este tipo de trabajo en red. Las mujeres africanas tienen la oportunidad de ser parte también de de la red mundial o de quedarse afuera sin contribuir a que el mundo escuche la verdadera voz de África. Tejer estas redes es parte del movimiento. El impacto que hagamos en temas de justicia social dependerá de la forma en que nos abramos espacio a través de las redes existentes para hacer conocer nuestro pensamiento.
El uso de espacios electrónicos es un ejemplo de cómo las mujeres pueden ampliar los límites geográficos y aquello que nos divide para organizarse en red con el objetivo de cambiar al mundo.