Nena, ¿qué vas a ser cuando seas grande? ¡Astronauta! ¿Cuántas habremos contestado algo por el estilo? Muchas sin duda. ¿Cuántas pudieron hacerlo realidad? Muy pocas.
La vida, las dificultades, los temores propios y los ajenos, el hacer lo que se espera que hagamos… sobre todo en el caso de las mujeres.
Pero, por suerte, muchas se animaron… y, curiosamente, lo lograron.
Ellen Ochoa nació en Los Ángeles el 10 de mayo de 1958 y, curiosamente, no quería ser astronauta. Expresado en sus propias palabras:
«…recuerdo mirar al Apollo 11 descender sobre la luna en el verano antes de iniciar la escuela secundaria inferior. A pesar de estar fascinada por el evento, nunca se me ocurrió que podría llegar a ser astronauta. Simplemente asumí que la exploración del espacio estaba limitada a un grupo de personas muy distintas a mí».
No obstante, la exploración del espacio es un campo abierto a cualquiera que esté interesado en aprender nuevos temas, en investigar misterios y en trabajar intensamente para alcanzar sus metas…
No fue hasta que estuve en la escuela de graduados que me enteré del proceso de selección de astronautas y me di cuenta de que la NASA estaba buscando a personas como yo.
Esta fue una maravillosa sorpresa -y el reto de tener que tratar de obtener los mejores resultados en la escuela y en el trabajo para alcanzar una meta tan emocionante.
Siento que he tenido una gran suerte al ser escogida como astronauta y haber sido elegida para la misión del ATLAS 2.
Este vuelo me ofrece la increíble oportunidad de estar involucrada en un importante esfuerzo de investigación científica para comprender cómo el Sol y las actividades humanas afectan nuestra atmósfera».
La historia fue más o menos así. Vivió en La Mesa, California. Estudió en a escuela secundaria Grossmot en La Mesa donde recibió su título de bachiller de ciencias en física. Terminó su maestría y un doctorado en ingeniería eléctrica de la universidad de Stanford. Investigó en sistemas ópticos, fue co-inventora de un sistema de inspección óptica.
Finalmente fue seleccionada por la NASA en enero de 1990 y se hizo astronauta
La Dra. Ochoa ha viajado al espacio, supervisando equipos de 35 ingenieros y científicos en investigaciones y desarrollos de sistemas de computadoras para misiones aereoespaciales, ganado premios que incluyen la medalla de Servicio Excepcional (1997), medallas de Vuelos Espaciales (1994, 1993), y el Premio de Jefatura de Herencia Hispánica.
Es miembro de la Sociedad Óptica de América (Optical Society of America), del Instituto Americano de Aeronáutica y Astronáutica (American Institute of Aeronautics and Astrounautics), y sociedades honorables de Phi Beta Kappa y Sigma Xi y, para acallar a las malas lenguas, es esposa y madre…. ¿pueden creer que a esta chica también le queda tiempo para ser flautista clásica y andar en bicicleta?
Actualización: En junio de 2013, la Dra. Ellen Ochoa se convirtió en la primera jefa hispana del Centro Espacial Johnson