Europa, despues de los últimos cumbres AmLat-Europa ¿hizo algo concreto por apoyar el Mercosur? Particularmente España y Portugal.
En el plano retórico algo se ha avanzado en la Cumbre de Madrid. Sin embargo, persiste la sensación de que Europa –incluyendo España y Portugal- tienen en la realidad otras prioridades, y que sólo aceptarán avanzar en las negociaciones con el Mercosur, como reacción a los avances que se produzcan en las negociaciones con los Estados Unidos. Al menos no han demostrado lo contrario con hechos contundentes.
¿Cuáles son las expectativas para el desarrollo del Mercosur con la nueva presidencia de Lula en Brasil?
Lula, el Presidente electo del Brasil, ha sido claro en cuanto a la prioridad que le otorgar a la alianza con la Argentina y al Mercosur, en todos los planos (un Mercosur multidimensional) y como parte de la estrategia de negociaciones en la OMC, con los Estados Unidos y el ALCA, y con la Unión Europea. Cabe esperar en tal sentido, una acción más vigorosa orientada a otorgarle nueva fuerza y vigencia al Mercosur, que le permita ser una eficaz plataforma para negociar y competir en el mundo. Dependerá ahora de la imaginación para encontrar fórmulas realistas, que permitan superar los puntos débiles que han contribuido a disminuir la eficacia y la credibilidad del Mercosur.
¿Cuál es su opinión sobre la «corrida» de los EEUU al petróleo del Atlantico Sur y en particular en Africa Occidental y el Golfo de Guinea?
América del Sur ocupa un lugar significativo en cualquier estrategia global en materia de petróleo y de gas. Las dificultades actuales y potenciales en otras regiones, especialmente el Medio Oriente, acrecentarán el valor que la región tiene en este plano, tanto para los Estados Unidos como para el Brasil.
Mercosur: reto al destino
Por Dra. Susana Orsino. 3.Dic.02
El Mercosur es un proceso de integración que se debatió entre el idealismo bolivariano, el escepticismo acerca de un futuro promisorio y la construcción silenciosa de una realidad regional que aspiraba ser una opción estratégica.
Después de más de 10 de su creación, hoy el Mercosur se halla frente al desafío de enfrentar un reto a su destino. Nuevos vientos de renovación y una nueva búsqueda de su identidad aparecen como prioridad en la agenda de la política exterior del Brasil del Presidente Ignacio «Lula» Da Silva. Cuando muchos presagiaban el final de una muerte anunciada en manos del ALCA, una vez más como el ave fénix, el Mercosur renace de sus cenizas.
Esta nueva instancia encuentra a un Mercosur integrado con características muy diferentes a la de la Unión Europea, ya que desde su génesis se concibió como una construcción intergubernamental, con baja institucionalidad, escasa armonización jurídica y con una volátil coordinación de las políticas macroeconómicas de los países socios.
El Mercosur es una Unión Aduanera con algunas excepciones y regímenes especiales y una serie de dificultades que se detectan tanto en las relaciones intra y extra Mercosur.
Hasta hace pocos meses muchos presagiaban un agónico y lento final del Mercosur, cuyo inicio se remonta a la devaluación del real en 1999 y que se precipita con la crisis sin precedentes de la Argentina que modifica todo el escenario regional. Jaqueado en la parte externa con el avance de las negociaciones del ALCA hacia una zona de libre comercio para el 2005 y los reiterados intentos de Estados Unidos de llevar las negociaciones al terreno bilateral con los países del Bloque. Por otra parte, no mejor situación se vislumbraba por el lado de la Unión Europea, que además de que el Mercosur no constituye una de las prioridades en su agenda externa, no tenía demasiado interés de negociar temas sensibles como los subsidios y el libre acceso de nuestros productos en el mercado europeo.
El poco impulso político, más allá de amargos intentos de relanzamiento del Mercosur en el gobierno anterior, no dejaba traslucir una verdadera convicción acerca del futuro de este proceso, sólo algunas señales tenues como la introducción del Tribunal Permanente de Revisión en materia de solución de controversias y la normativa sobre libre circulación de personas, que se dieron en el presente año, no hubo intensión política de convertir el Mercosur en una herramienta prioritaria de la estrategia regional.
Un viraje fundamental se produce con respecto a esta visión del Mercosur, cuando el recientemente electo presidente de Brasil, Ignacio Lula Da Silva, decide imprimir un nuevo rumbo al proceso integrador. Si quedaba alguna duda de ello, la reciente visita de Lula a la Argentina sella esta posición.
Algunos lineamientos y pautas para la nueva Agenda del Mercosur
Desde la campaña electoral Lula expresó esta idea de profundizar el Mercosur y resaltar que no negociará con el ALCA sin el bloque, teniendo en cuenta que considera que el ALCA más que un proceso de integración de América es un proceso de «anexión», donde nuestros países quedarían expuestos a las políticas discrecionales de los países desarrollados y amenazados por el avance de los capitales especulativos y depredatorios que azotaron la economía de nuestros países en los últimos años. Para contra restar estos efectos y construir una posición negociadora más sólida, propuso los siguientes puntos de entendimiento el pasado lunes en Buenos Aires:
- Reconstruir el Mercosur a partir de una concepción estratégica de la región.
- Instaurar un nuevo modelo económico regional basado en la solidaridad y la coordinación de políticas macroeconómicas de los países socios.
- Negociar conjuntamente con Estados Unidos, el ALCA y la Unión Europea, profundizando una política externa común.
- Priorizar la estabilidad política y la paz social de los países de la región como garantía de una futura estabilización económica y monetaria.
- La creación de una moneda común como proyecto de más largo plazo.
- Creación de un Parlamento del Mercosur con miembros elegidos por el voto popular de los ciudadanos del Mercosur, al estilo del parlamento europeo.
Estos temas serán tratados el próximo día 14 de enero en Brasilia en la reunión de Cancilleres y Ministros de Economía con los respectivos equipos técnicos, la agenda es muy intensa y sustancial, al impulso de Brasil el Mercosur podrá tomar un giro de 180 grados, aunque seguramente existirán algunas voces que aplaquen este nuevo aire mercosureño.
Hoy el Mercosur va nuevamente en busca de su destino, la incógnita a develar es, si será un verdadero regreso con gloria o sólo el último intento antes del ocaso del guerrero…
Los entrevistados
La Dra. Susana Orsino es Abogada- Máster en Gestión de Negocios y Formación Profesional para Latinoamérica y Mercosur.-
Directora del Area Comercio Exterior y Mercosur de la consultora FL & Asociados.
Actualmente se desempeña como Asesora Legal y Técnica del Ministerio del Interior. Realiza actividades Académicas y de Investigación en: Normas del Mercosur con Perspectiva de Género (UNIFEM – Naciones Unidas).
El Dr. Félix Peña es director de la Fundación BankBoston, en Buenos Aires, fué subsecretario del Mercosur y la Integración Económica, del Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina. El Dr. Peña dirige el Instituto de Comercio Internacional de dicha Fundación. Actualmente, junto con la Fundación Export.Ar, están desarrollando un Programa tendiente a formar grupos de empresas que se unen para aumentar sus posibilidades de ingresar con sus productos a los mercados externos.
El Dr. Hugo Varsky es presidente del Comité Internacional de El Club de las Regiones, secretario del Programa Bolívar, con sede en Buenos Aires y responsable de las Relaciones Internacionales de la Fundación Garantizar.
El Club de las Regiones tiene como función Impulsar la creación e implementación de estrategias para el desarrollo regional, enfocando esta acción en la innovación, la importancia estratégica de las pequeñas y medianas empresas. Además impulsa ámbitos internacionales de discusión e intercambio sobre temas sustanciales del desarrollo empresarial latinoamericano.