En la actual Sociedad de la Información y el Conocimiento, las nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC´s) han modificado la forma de trabajar y comunicarse.
Teletrabajo y teletrabajador son dos conceptos cada vez más escuchados pero… ¿qué significan realmente?.
¿Qué es el teletrabajo?
Básicamente, el teletrabajo es “trabajo a distancia”. Este concepto hace hincapié en un aspecto fundamental de esta nueva modalidad laboral: la distancia. Es decir, la actividad profesional o empresarial se lleva a cabo en un lugar distante del que ocupa la organización o persona para la cual se trabaja.
El teletrabajo sólo adquiere su pleno significado cuando es ejecutado con la ayuda de las telecomunicaciones y la informática, es decir, con el apoyo de lo que se ha dado en denominar telemática. La informática hace posible el procesamiento y digitalización de datos (información), mientras que las telecomunicaciones permiten la transferencia de los mismos y la comunicación entre las partes.
Estos dos conceptos (distancia y telemática) son la base del teletrabajo, que puede definirse como “modalidad laboral que consiste en realizar tareas o prestar servicios a distancia, utilizando Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC´s) como herramientas de trabajo y de comunicación entre las partes”. En esta definición queda clara la relación lejanía – nuevas tecnologías, así como la función que deben cumplir las mismas.
Foto: KellySue
La antigua Sociedad Industrial ha dado paso a la actual Sociedad de la Información y el Conocimiento, que surge con la aparición y rápida evolución de las nuevas tecnologías. Esta rápida evolución determina que el teletrabajo sea un concepto en constante desarrollo, que requiere de la sociedad una profunda reorganización socio-cultural para su eficiente aplicación.
¿Quién es teletrabajador?
El teletrabajo no es una profesión en sí, sino una forma particular de desempeñar una tarea remunerada. Por lo tanto, se considera teletrabajador a aquél que adopta esta modalidad laboral para desarrollar sus tareas en forma habitual.
La ecuación distancia + nuevas tecnologías = teletrabajo siempre debe estar presente.
Esto significa que:
1. Para ser reconocido como teletrabajador es imprescindible el empleo de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TIC´s): Por ejemplo, si un trabajador hace uso de su PC para capturar pedidos, emplea las redes de telecomunicación para desempeñar sus tareas, utiliza el correo electrónico como medio de comunicación con su empleador, y recibe las listas de precios y productos a través de Internet, puede considerarse un teletrabajador.
2. Trabajar en casa sin tecnologías de la información y la comunicación no es teletrabajar: No son teletrabajadores quienes ensamblan las piezas de objetos más o menos sofisticados –bolígrafos, relojes de pared, mecheros- sentados a la mesa del cuarto de estar, ni quienes cosen prendas o balones de cuero en su casa. Las actividades teletrabajables “son” gracias a las TIC´s, y difieren de las tradicionales en que no existirían sin ellas.
3. Si no se utilizan las telecomunicaciones no hay teletrabajo, aunque intervenga la informática: Un trabajador que recibe papeles con datos, los procesa en su casa, y luego entrega un CD con la información ya procesada, no es un teletrabajador. En este ejemplo, las telecomunicaciones no intervienen para nada, de modo que –aunque intervenga la informática- es un caso de trabajo a domicilio tradicional.
4. Si no existe comunicación entre las partes, no hay teletrabajo: Un vendedor que vuelca los datos de las órdenes de venta en su ordenador personal portátil, y que al final del día acude a la empresa para rendir cuentas de su trabajo, no se considera un teletrabajador. Como no existe comunicación entre las partes desde sus respectivas PCs, éste es un trabajo en relación de dependencia tradicional.
5. El trabajo, basado en las telecomunicaciones y la informática, no es teletrabajo si no media la distancia: No es teletrabajador quien se vale de las telecomunicaciones y la informática para realizar sus tareas, pero que se desempeña en el mismo lugar que ocupa la organización o persona para la cual trabaja. La distancia, la lejanía, la no presencia en el lugar de trabajo, es una característica fundamental del teletrabajo.
6. No son teletrabajadores quienes no aplican esta modalidad laboral en forma habitual: Quienes trabajan en su casa con una PC durante la tarde o el fin de semana (es decir, en forma ocasional), no son teletrabajadores. La continuidad es otro factor fundamental.
Cabe destacar que el teletrabajo puede desempeñarse en relación de dependencia o en forma autónoma. Sólo cambia el tipo de relación, no la forma de trabajo.
En el primer caso, la relación es empleado – empleador; en el segundo, prestador de teleservicios – cliente. Y en los dos casos, la ecuación es “distancia + nuevas tecnologías = teletrabajo”.