Mas abajo, la famosa pagoda taoísta de Shibaozhai, apoyada en la ladera de una roca sagrada (Shibao, la Piedra del Tesoro), también está a salvo. Esta pagoda de madera con diez pisos y 50 metros de altura data de la dinastía Qing (Siglo XVIII). Diariamente, es visitada por centenares de turistas que trepan sus laderas para desfrutar de una panorámica única sobre el río, que parece vivir en medio de una neblina lechosa permanente. Solo el pórtico de entrada, situado en la cota de 173,5 metros, deberá ser resguardado de la furia de las aguas.
Según las autoridades chinas, 39 de los 108 locales históricos inventariados en los bajos del Yangtsé quedarán, total o parcialmente, sumergidos por las aguas de la represa, por lo que ya se decidió el traslado del templo de Zhangfei, del municipio de Yunyang a otro local.
En el segundo día, 20 de septiembre, desembarcamos en Wushan para tomar barcos más pequeños que nos conducen a través de las llamadas Tres Gargantas Menores – Puerta del Dragón, Mística y Esmeralda -, en el río Daning (un afluente del Yangtsé). Aquí, los efectos de la subida de las aguas ya son visibles. Los márgenes perderán las playas fluviales donde, en la estación seca, un remolino de pequeñas embarcaciones intenta conseguir turistas y la pasarela de madera en la pendiente del acantilado se encontraba parcialmente sumergida. Los hombres que guiaban los barcos a fuerza de brazos, por entre peligrosas rocas ya eran una imagen del pasado al momento del cierre de las compuertas. El descenso del lecho del río en la estación seca también dejó de representar un peligro para la navegación.
Nueva Muralla China
A partir de junio de 2003, con el cierre de las compuertas de la Represa de las Tres Gargantas, se abrió un canal doble de esclusas con cinco niveles, a través del cual las embarcaciones pueden atravesar la zona de la represa en aproximadamente tres horas, ya sea en sentido ascendente o descendente. Mientras tanto, a partir de 2009, los barcos de turismo (hasta 2722 toneladas) podrán ser transportados en un «elevador» único en el mundo, en cerca de 30 minutos. Se trata de una caja de 240 metros de longitud por 24 metros de ancho, con un nivel de cuatro metros de agua.
Pasamos por las esclusas durante la noche del sábado al domingo (del 20 al 21 de septiembre), en compañía de una docena de otras embarcaciones, entre las que estaban otros dos paquebotes fluviales, «descendiendo» de una cota de 135 metros a otra de 68 metros en el último nivel. La mayoría de los pasajeros se mantenía despierto, asistiendo al espectáculo en la cubierta superior, pero en verdad, el proceso es lento y repetitivo.
En el obrador, mas de 16 mil operarios e ingenieros trabajan por turnos 24 horas por día. En el «pico» de la construcción de la represa (entre 1999 y 2001), este número llegó a superar los 28 mil trabajadores. Con una estimación de 17 años de duración, se trata del mayor proyecto de construcción en China, curiosamente, desde la Gran Muralla, cuyo inicio de construcción data de hace 2500 años. La roca extraída para su construcción (102,8 millones de metros cúbicos) y los 27,9 millones de metros cúbicos de concreto empleados, serian suficientes para levantar 44 pirámides egipcias o 100 edificios idénticos al Empire State Building, de New York.
Cuando esté concluida, en 2009, la represa tendrá tres kilómetros de longitud y 185 metros de altura. El nivel de las aguas por detrás de la represa alcanzará la cota de 175 metros, creando una albufera con una extensión de 643,7 kilómetros y un ancho medio de 1,1 kilómetros, cerca del triple del lago Titicaca, en los Andes y cuatro veces mayor que la de Alqueva (la mayor de Europa), que inundará 28800 hectáreas de tierras agrícolas, forzando al desplazamiento a un millón trescientos mil personas de dos ciudades, once villas y 116 aldeas de la región.
En contrapartida, la represa producirá energía eléctrica para la mitad de China a partir de una fuente confiable, renovable y relativamente barata, con la consecuente reducción de la emisión de dióxido de carbono asociada a la quema de carbón en las centrales termoeléctricas.
La Represa de las Tres Gargantas tendrá una capacidad inicial de 18200 megawatts, que será posteriormente elevada a 22400 MW con un total de 32 turbinas generadoras de electricidad y una producción anual de 84700 millones de MW.
El costo total de la obra se estima en 203,9 mil millones de yuan (cerca de 24,8 mil millones de euros), un valor equivalente al de 12 naves espaciales del tipo Space Shuttle.