Sin duda quién se toma tres semanas de vacaciones puede experimentar un viaje extraordinario por su propia cuenta. Sudáfrica es un país superlativo en el que se reúnen la vida salvaje natural con el progreso moderno y la energía enraizado en la historia negra de este continente maravilloso.
En un primer viaje a África, empezar por Sudáfrica es una buena opción: es un país desarrollado, la infraestructura está en constante mejora, el clima es privilegiado y la fauna africana es sensacional. Además 2004, el año en que realicé esta travesía, fue el año durante el cual los ciudadanos de la República de Sudáfrica celebran su primera década como una nación democrática.
Nuestro viaje nos lleva a una aventura que empieza en Johannesburgo y sigue su curso a través de provincias con nombres tan exóticos (al menos para mi, una joven alemana) como Mpumalanga, el Parque Nacional Kruger, Kwazulu-Natal y las montañas del Dragón.
Jo’burg, Jozi, la Ciudad del Oro, Johannesburgo, capital de la provincia de Gauteng es la mayor urbe de Sudáfrica. Está en rápido crecimiento, lo que la afea un poco, pero es rica, vital y saca provecho de su clima privilegiado. Jo`burg es una ciudad joven.
Surgió casi de la noche a la mañana, después del descubrimiento de oro en 1886, y sus habitantes la construyeron con un estilo arquitectónico que mezcla lo colonial holandés con modernos rascacielos de vidrio.
La gran diferencia con muchas ciudades sudafricanas en las que hay tan pocas caras negras que uno casi se olvida que está en África, es que el centro de Jo’burg ha sido recuperado por la población negra que conforma el 73 por ciento de la población.
Pero no todo es rosa. Johannesburgo tiene una reputación de violencia y la tasa de Sida (HIV) es alta, tome precauciones. Hay enormes cercas rodeando las casas y se puede escuchar a los amenazadores perros que es mejor no conocer cara a cara. La gente local sabe muy bien por donde circular sin problemas y por donde no es aconsejable ir.
La Johannesburgo moderna
Johannesburgo es una ciudad muy verde que cuenta con 17 reservas naturales y unos seis millones árboles. Sus plazas son bellas, los edificios más antiguos están impecables y hay museos, teatros, cultura y una vida nocturna para todos los gustos y cada vez más amplia. La ciudad ofrece más que 150 sitios de patrimonio para visitar.
No debe dejar de visitar el barrio cultural Newtown y Hillbrow, la meca de la bohemia.
Como orientarse en Johannesburgo
La forma más fácil de ubicarse en la ciudad es buscar en el horizonte la silueta de las dos modernas torres de comunicaciones: la torre Hillbrow y la Brixton.
* Si la torre Hillbrow está a la izquierda de la torre Brixton, usted está en la zona norte
* Si la torre Hillbrow está más cerca que la torre Brixton, usted está en la zona este.
* Si la torre Brixton está a la izquierda de la torre Hillbrow, usted está en la zona sur.
*Si la torre Brixton está más cerca que la torre Hillbrow, usted está en la zona oeste.
Dependiendo de su ubicación, es posible que vea también un edificio cilíndrico, el Ponte City Apartments, ubicado cerca de la torre Hillbrow.
Museos y Galerías
- Johannesburg Art Gallery, ubicada en la esquina de Klein y King George, Joubert Park, T +27 (0)11 725 3130. La mayor galería de arte en el continente africano.
- Mandela Family Museum en Orlando West, Soweto.
- El Museo del Apartheid, T +27 (0)11 309-4700. Conmovedor e informativo del pasado turbulento del país. Le llevará por lo menos medio día ver los videos y el material expuesto. Localizado al costado de Gold Reef City es, sencillamente, una visita obligada.
- Chérie De Villiers Gallery, Ubicado en la planta baja del Rosebank Mall, Rosebank,. T +27 (0)11 788-9949 ([email protected]). Obras de artistas sudafricanos.
- Standard Bank Gallery, ubicada en la esquina de Simmonds y Frederick, Johannesburg. T +27 (0)11 631-1889. Horario: de 8AM a 4:30PM de lunes a viernes y los sábados de 9AM a 1 PM. Entrada libre.
- South African National Museum of Military History. Erlswold Way, Saxonwold, al lado del Zoológico. T +27 (0)11 646-5513. Abre diarimente de 9AM a 4:30PM. Una Buena colección de equipamiento militar, incluyendo uno de los pocos jet de combate ME 262 que todavía quedan de la Segunda guerra mundial. Tiene un snack bar y una tienda de regalos que vende equipamiento genuino y reproducciones de época. Entrada: R20.
También hay grandes shopping malls sofisticados y mercados artesanales como el Rooftop Market. No deje de visitar el Oriental Plaza, un shopping donde los 360 propietarios son todos de origen indio, el único lugar donde va a poder regatear el precio, bien al estilo oriental.
Mai Mai es el mercado más antiguo de la ciudad, dedicado a las hierbas medicinales.
El Mercado de pulgas Rosebank Rooftop Flea Market, se encuentra en el nivel superior del Rosebank Mall, allí podrá encontrar una basta selección de artesanías locales.
El Hyde Park es el mall más chico pero más sofisticado, mientras que Sandton City es el más grande (dicen que del hemisferio sur), tanto que bien puede pasar el día entero ahí.
Soweto
Los suburbios que están habitados por blancos son barrios aislados donde los negros trabajan en tareas domésticas. En la tasa de desempleo, la población negra tiene el 91 % y vive en los townships (barriadas negras). El mayor de los cuales, Soweto, tiene fama mundial; Soweto es una abreviatura de Southwestern Townships.
En principio se diría que no es un lugar adecuado como atracción turística. Sin embargo es posible visitarlo para tener una visión de la realidad sudafricana. La mayoría de los sudafricanos blancos ignora cómo es la vida dentro de los townships.
Si bien en Johanesburgo hay doce horas diarias de sol, los habitantes del township tienen que darse por contentos con menos. ¿Por qué? Wonderboy, estudiante y colaborador de la agencia de viaje “Imbizo Tours & Travel” y parte integrante de la comunidad de Soweto, nos responde: cuando falta electricidad en muchas partes y la recolección de basura es deficitaria, hay que vivir con el fuego. Una cúpula de humo rodea el barrio. “Bienvenidos a Sudáfrica, el país de los contrarios”, sonríe irónicamente Wonderboy.
Soweto es un lugar traumático. Escenario de la pesadilla del apartheid, en Soweto vivían y viven leyendas como el premio del Nóbel de la Paz (1984) Desmond Tutu, y el símbolo de la victoria negra y también Premio Nóbel de la Paz (1993) y luego Presidente de Sudáfrica, Nélson Mandela.
Pero no en todos los lados reina la miseria. En la periferia se puede ver señales de que finalmente la vida de muchos han mejorado después del apartheid. Hay fachadas lindas, casas con jardines. Pero Wonderboy nos lleva a un mundo peor.
Mandela Village
El Mandela-Village es un lugar en el que vienen los que no saben adonde ir.
Grandes familias viven en la estrechez y oscuridad de cabañas miserables que ha asignado a ellos la administración de la comunidad como solución transitoria.
Sin embargo la gente trata de arreglarse para mejorar su nivel de vida. Nos sigue una multitud de niños pidiendo chocolate. Saben bien que el turista trae regalos…
Museo de Nelson Mandela y el monumento de Hector Pieterson
Nos dirigimos a la parte histórica del township. Hay que ver el museo de Nelson Mandela y el monumento de Hector Pieterson. En el 16 de junio de 1976 una unión de estudiantes negros convocó una manifestación contra la introducción del Afrikáans, el idioma de los opresores, en las escuelas de los negros.
La policía que llegó a reprimir la sublevación dejó atrás una estela sangrienta. Una foto de un profesor llevando en brazos a un estudiante muerto llamado Héctor Pieterson circuló por todo el mundo. Desde entonces es testigo del pasado atormentado de Soweto.
Tanto la significación del barrio en su lucha contra la apartheid como su condiciones sociales en estos días (42 % de los habitantes de Johanesburgo viven en el township) explican porque los turistas y sus cámaras son bienvenidos en Soweto.
Por un lado los Sowetanos quieren mostrar que a pesar de todo existe un espíritu de comunidad. Y, por otro lado, quieren que los turistas muestren su realidad en el exterior. Es una queja muda. Aunque el apartheid ha sido sepultado en los papeles, la desigualdad todavía sigue.
Continuaremos viaje hacia Mpumalanga y el Parque Nacional Kruger.